259
para poder reproducirse (Lluch – Belda et al.,
1991), y al igual que otras especies de peces tratan
de adaptarse a distintas situaciones ambientales
con diferentes estrategias reproductivas con el fin
de asegurar su reproducción (Wootton, 1990). En el
evento El Niño Costero 2017, la anchoveta peruana
mostró un comportamiento reproductivo diferente
a su patrón histórico, tanto en la fracción desovante
(que involucra el desove directamente) como en el
índice gonadosomático (que involucra maduración
y desove), adoptando una estrategia reproductiva
que le permitió asegurar un desove de verano. Así,
en el mes de enero (calentamiento rápido), las
anomalías positivas de FD e IGS tuvieron valores
que determinaron un “efecto moderado” positivo
dentro de la maduración y desove del recurso,
como una posible estrategia ante el fuerte
calentamiento que se produciría en los meses de
febrero y marzo, época en la cual la anchoveta
peruana presenta su periodo secundario de desove.
En el mes de febrero (“maduración y llegada de
otra onda Kelvin”), se observó en la FD una
anomalía negativa de “efecto fuerte”; mientras que,
en el IGS la anomalía positiva fue de “efecto
moderado”. Esta anomalía negativa con “efecto
fuerte” para la FD es explicada porque,
normalmente, en el mes de febrero se produce el
“pico de desove” de verano, el cual fue afectado por
el evento El Niño Costero 2017. En el caso del IGS,
la anomalía positiva de “efecto moderado” se
explica debido a que, en el evento El Niño Costero
2017, a pesar que la mayor actividad reproductiva
se observó en el mes de enero, en el mes de febrero
aún se observó una importante frecuencia de
hembras con gónadas maduras. Finalmente, en el
mes de marzo (“decaimiento”), tanto la FD como el
IGS mostraron anomalías negativas de “efecto
fuerte”, debido a que, generalmente, en este mes
ambos indicadores comienzan su disminución
porque el proceso reproductivo inicia su
declinación; sin embargo, en el evento El Niño
Costero 2017 se presentaron valores bajos de
ambos índices, debido a que el recurso estuvo
ingresando a su etapa de reposo gonadal producto
del impacto ocasionado por este evento en su
reproducción.
La anchoveta peruana, ante la llegada del evento El
Niño Costero 2017, se adaptó a las cambiantes
condiciones oceanográficas adelantando su desove
de verano al mes de enero, lo que produjo una
anomalía positiva de “efecto moderado” en ese
mes, siendo una estrategia reproductiva mostrada
frente a estas condiciones. Mori et al (2011),
indican que las anomalías estandarizadas de IGS y
FD siguen patrones similares a los índices de
variabilidad ambiental, basados en datos de
temperatura, oxígeno y termoclina estimados y
tratados para la misma zona (Swartzman et al.,
2008; Chávez et al., 2009); además, los cambios en
el ciclo reproductivo de las especies están
relacionados o influenciados por los cambios en el
ambiente (Agostini & Bakun, 2002; Basilone et al.,
2006; Brochier et al., 2010); por ello, es prudente
pensar que, ante cambios en su medio, el recurso
puede mostrar como respuesta una variación en su
comportamiento reproductivo. Bouchon et al.
(2010) mencionan que la anchoveta peruana no se
comporta igual frente a todos los eventos El Niño,
afectando sus periodos reproductivos, teniendo
impacto en la intensidad de desove y causando
desfases en sus épocas donde presentan mayor
intensidad. Esto ocurre debido a que estos eventos
cálidos fuertes, generan estrés por el incremento de
la temperatura, calidad del alimento y competencia
intra-especifica. Hernández-Satoro et al. (2019a)
analizan el comportamiento reproductivo de E.
ringens durante 1997 y 2016 frente a eventos El
Niño, mencionando que durante periodos cálidos
hay un cambio en el patrón reproductivo, tanto en
ocurrencia como en intensidad, mostrando un
retraso en el inicio de la actividad reproductiva y
una disminución en la intensidad. Además,
analizan en el norte de Chile las temperaturas
superficiales del mar desde 1988 hasta 2017;
obteniendo 3 periodos importantes: 1988 a 1993,
1993 a 2009 y 2009 al 2017. Estos 3 periodos son
relacionados con cambios en el comportamiento de
la actividad reproductiva de E. ringens, donde se
muestra que, los cambios ambientales tienen una
afección directa en el comportamiento
reproductivo de esta especie.
En el evento El Niño Costero 2017, podemos
observar que la FD presentó anomalía negativa que
generó un “efecto fuerte” en los meses de febrero y
marzo; mientras que, en el IGS se observó esta
anomalía negativa con “efecto fuerte” en el mes de
marzo. Esta diferencia se debe a que el desove es un
evento mucho más sensible a cambios ambientales
que el proceso de maduración gonadal del
individuo, siendo la temperatura óptima un
impulsor de las actividades reproductivas (Motos
et al., 1996); contemplando el cálculo de la
The Biologist (Lima). Vol. 17, Nº2, jul - dic 2019
Anomalies of reproductive indexes