Bertha Navarro Navarro
El libro se estructura en cinco grandes
secciones: La Introducción, donde se expli-ca el
porqué, el cómo y el quién debe leerlo,
definiendo como su destinatario objetivo a los
docentes. La primera parte de denomina Hu-
moris Causa y en ella se muestra la importancia
del humor, de la risa y de su ejercicio entre los
docentes. En la segunda parte, La letra con risa
entra, se exponen recomendaciones y ejerci-cios
para aplicar la pedagogía del humor como una
estrategia para influir favorablemente so-bre el
autoconcepto, la atención y la memoria. La
tercera parte, Motivar a leer es humor para mí,
presenta formas de motivar a leer como un
ejercicio continuo de desarrollo personal y
social en el que la práctica de animación a la
lectura trasluce ánimo y proximidad. El libro se
cierra con los Apéndices operables, cuatro en
total; en ellos, Pelayo, desarrolla el soporte
teórico de su propuesta a partir de constructos
puntuales. En esta sección de ‘apéndices’ nos
recuerda que “los animales tienen emociones
como la alegría y la expresan, pero el huma-no
tiene sentido del humor y eso tiene que ver con
el lenguaje, la representación simbólica. Ahí
está la diferencia” (p.135).
Es, precisamente, el sentido del humor en el
marco de la Pedagogía del Humor el tema
medular del texto. Para Pelayo la Pedagogía del
Humor “es aquella disciplina que, teniendo por
objeto la educación, incorpora el humor como
clave metodológica de sus intervenciones” (p.
47). Así, el desafío para los docentes es no solo
desarrollar una honorable mediación sino
también una ‘humorable mediación’ porque el
humor invita a la moderación, a la madurez
emocional y atenúa el pensamiento obsesivo,
la rigidez y los extremismos.
Conviene mencionar que la Pedagogía del
Humor es una veta nueva en la investigación
aplicada del quehacer educativo, especial-mente
en el universitario; sin embargo ya existen sellos
editoriales que han publicado investigaciones al
respecto como Desclée De Brouwer e incluso es
un tema que se aborda en tesis de formación
docente a nivel de pre y post grado. La lectura de
Gracias por enseñar (Prácticas para educar con
humor) nos acercará a este nuevo campo del
quehacer docente que puede ser abordado en lo
educativo, propia-mente, como en la investigación
psicológica y sociológica pues “ninguna sociedad
saludable puede dejar de reírse de sí misma
tranquila y privadamente; nadie puede estar sano
si no se somete a autoescrutinio, sin volverse hacia
ad-entro para ver dónde pudo haberse extralimit-
ado” (Gonzales, 2013, p. 18).
Referencias
Gonzales, C. (2013). El humor como instru-
mento pedagógico. (Tesis para optar el
título profesional de Licenciada en
Len-gua y Literatura Hispánica con
mención en Literatura, Universidad de
Chile, San-tiago de Chile).
226 | Cátedra Villarreal | V. 3 | No. 2 | julio-diciembre | 2015 |