Neotrop. Helminthol., 8(2), 2014
El parásito Cruzia tentaculata fue descrito por
Rudolphi, (1819) como Ascaris tentaculata y
diferentes autores respaldaron esta
identificación (Dujardin, 1845; Diesing, 1851;
Leidy, 1856). Schneider (1866), clasificó al
parásito como Oxysoma tentaculata Travassos
1917 y luego se le identificó como C.
tentaculata, nombre con la que actualmente se
conoce descrito en Travassos (1922)
considerando las características del divertículo
intestinal proyectado a la región anterior y las
columnas de dientes que recubren la capsula
oral, también descrito por Anderson et al.
(1974).
En este estudio se observaron características
morfológicas, como por ejemplo; la presencia
del divertículo intestinal, la columna de ocho a
catorce dientes en la capsula oral, la forma
triangular del gobernaculo, y la disposición y el
número de las papilas caudales en los machos
tres pre-cloacales, tres cloacales y cuatro post-
cloacales, que coinciden con las proporciones de
tamaño y de descripción del parásito C.
tentaculata (Travassos, 1922; Vicente et al.,
1997; Adnet et al., 2009).
En el estudio de Adnet et al. (2009) describen
información nueva como la presencia de la
papila en el labio anterior de la cloaca y los
fásmidos en la región caudal de los machos y en
las hembras el par de papilas situados cerca a la
vulva, empero estas estructuras fueron
observados por microscopia electrónica.
El parásito del género Cruzia puede parasitar
tanto a marsupiales, como a reptiles, anfibios y
mamíferos (Adnet et al., 2009). En los
marsupiales, se ha reportado el parásito en
diferentes especies del género Didelphis y en
Metachirus nudicaudatus Desmarest, 1817,
(Travassos, 1922; Vicente et al., 1997; Quintao e
Silva & Martins de Araujo, 1999; Santa Cruz et
al., 1999; Correa et al., 2003; Adnet et al., 2009;
Tantaleán et al., 2010; Pinto et al., 2011).
La implicancia de la presencia de este parásito
sobre el estado de salud de D. pernigra aun es
poco estudiada. Sherwood et al. (1968)
realizaron necropsias a 33 zarigueyas (Didelphis
virginiana Kerr, 1792) logrando identificar a C.
tentaculata a nivel del ciego intestinal de manera
frecuente sin que se hallaran lesiones
patológicas que hayan estado afectando el
desarrollo de sus funciones normales. Sin
embargo en el estudio de Santa cruz et al. (1999),
reportan lesiones histopatológicas como tiflitis a
consecuencia del parásito C. tentaculata en D.
albiventris.
La información generada se constituye en el
primer reporte de esta especie parasitaria en
didélfidos de Bolivia, permitiendo así ampliar la
distribución geográfica de C. tentaculata en el
continente Sudamericano.
Este estudio se llevo a cabo con el apoyo
financiero de la fundación Bobolink y el
proyecto PREDICT en el marco de las
actividades del Programa Gran Paisaje Madidi-
Tampopata de WCS. Agrademos a Glenda
Ayala, Herminio Ticona, Guido Ayala y Maria
Viscarra por la colecta de muestras durante el
trabajo de campo; a Robert Wallace y dos
revisores anónimos por la revisón y comentarios
para mejorar este trabajo; y a Billy Borth,
propietario de la hacienda de Acero Marka, que
otorgó los permisos para el ingreso a su
propiedad y la realización de este monitoreo de
biodiversidad. Este estudio fue llevado acorde a
lo enmarcado en el permiso de Colecta de
muestras y/o especímenes proveído por le
Ministerio de Medio Ambiente y Agua de
Bolivia (permiso numero: MMAyA-VMACC-
DGBAP N° 1289/09) y no implicó sufrimiento
de animales por parte de los investigadores.
DISCUSIÓN
AGRADECIMIENTOS
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Adnet, F, Anjos, D, Menezes-Oliveira, A &
Lanfredi, R. 2009.
Further description of
Cruzia tentaculata (Rudolphi, 1819)
Travassos, 1917 (Nematoda: Cruzidae)
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